«Los puzles son una herramienta ideal para centrar la atención y respetan los distintos ritmos de aprendizaje»
Patricia Delgado.
–¿Qué es Grammazzle?
–Es una empresa que desarrolla material didáctico cuyo objetivo es facilitar el aprendizaje de la lengua inglesa. Nuestro buque insignia, con el que comenzó toda esta aventura, es Grammazzle. A día de hoy es nuestro material más popular y consiste en un conjunto de puzles gramaticales discriminatorios, los cuales permiten a la persona que está aprendiendo el idioma saber, en todo momento, si su oración es gramaticalmente correcta o no. – Estos puzles se aplican al aprendizaje de la gramática, ¿sirven también para otras parcelas del estudio?
–Encuentro en estos puzles una herramienta ideal con la que centrar la atención de los alumnos y además, son respetuosos con los diferentes ritmos de aprendizaje, tanto en el aula convencional como en el aula de apoyo.
–¿Este sistema funciona con la misma eficacia en alumnos de todas las edades?
–Sí, el único requisito es que los alumnos sepan leer, por lo que aconsejamos su uso a partir de 2º de Primaria. Por otra parte, el material ha sido testado satisfactoriamente en distintos contextos, tanto en colegios concertados como en públicos, con alumnado de España como alumnado nativo (Reino Unido y Estados Unidos), alumnado con necesidades educativas especiales…
–¿Por qué decidió emprender con un proyecto como este?
–A pesar de ser profesor de lengua inglesa, el inglés no siempre ha sido mi asignatura favorita, por lo que cuando llegó mi Proyecto Fin de Carrera tenía claro que quería conseguir el material didáctico con el que a mí me hubiese gustado aprender inglés. Dedicando mucho tiempo llegué al producto final, que pasó de una versión rudimentaria de papel, al cartón pluma, hasta llegar a la sofisticación de la impresión 3D. Tras permanecer un curso en Gales como docente, me animé a presentar el material a Yuzz (Banco Santander) donde gané a nivel regional, con lo que pude llevar mi proyecto a San Francisco y Silicon Valley. Posteriormente, me apoyó la Fundación Telefónica, con su programa Think Big, y por último con las EBT de Sodercán inicié mi andadura empresarial en el año 2016.
–¿En qué destaca su idea?
–En la innovación. Creo que la clave está en el juego, el alumno es capaz de darse cuenta de cuándo su oración es gramatical y cuando no es así consigue corregir la frase de manera autónoma y proactiva. Con ello aumentamos la motivación y autonomía del alumnado, reduciendo la ansiedad ante el nuevo idioma. El resultado son alumnos satisfechos que encuentran la predisposición necesaria para seguir avanzando.
–¿Quiénes son sus potenciales clientes y qué les aporta su proyecto?
–Mis clientes son profesores de inglés tanto de colegios como de academias de idiomas, que buscan herramientas novedosas que utilizar en sus clases, ya que, aparte de trabajar la gramática, con Grammazzle pueden adquirir vocabulario con Question&Answers o incluso hacer una sesión divertida con Escape Classroom. Estos tres materiales, que son los más vendidos en la web, también pueden ser usados por particulares, ya que son muy intuitivos.
–¿Cómo repercute el negocio sobre la zona en la que se ubica?
–En los inicios se testó el material en diversos centros educativos de la región, que fueron los primeros beneficiarios de los diversos productos. Hoy en día, gracias a la página web, el producto está llegando prácticamente a toda la geografía nacional. Las piezas se diseñan, fabrican y ensamblan íntegramente en Santander, y los materiales con los que se hace vienen de fabricantes españoles.
–¿Qué balance hace hasta el momento de su trayectoria empresarial y cómo ve el futuro?
–Los inicios fueron complicados, se mezclaban los números con la ilusión de querer compartir un material que a mí me funcionaba. A día de hoy, estoy satisfecho con la aceptación del producto, pero sigo trabajando para mejorar. Afortunadamente, cada vez son más los docentes que se animan a adaptarse a los nuevos tiempos, buscando nuevas formas de enseñanza para garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, siendo esa nuestra primera premisa para que cualquier alumno pueda adquirir el idioma de una forma diferente, lúdica.
–¿Qué papel han tenido los puntos de atención al emprendimiento en el arranque de su proyecto?
–Me han ayudado a concretar el plan de empresa, que pasó de aspectos muy generales a otros más concretos. Y me han animado a participar en diferentes certámenes, con cuyos premios he podido empezar el proyecto.
–¿Por qué decidió presentar su candidatura a Talento Cantabria y cómo espera que le ayude?
–Me gustaría seguir dando visibilidad al proyecto. En este tiempo, he tenido la posibilidad de darlo a conocer en distintos congresos educativos a nivel nacional, pero no he tenido esa suerte en mi tierra, y Talento Cantabria es una muy buena plataforma para hacerlo.